Durante los días 27 y 28 de noviembre ha tenido lugar el XI Congreso de Veterinarios de Porcino de Aragón (AVPA) en el cual Zoetis, empresa líder en salud animal, ha participado en una mesa redonda que tenía por objetivo debatir sobre cómo evaluar y qué impactos tiene el bienestar animal, así como las diferentes maneras de certificarlo.

En relación con este último punto, durante la jornada se presentaron dos certificaciones en bienestar animal. Por un lado, Antoni Dalmau, del IRTA (Institución de Investigación y Tecnología Agroalimentaria), presentó la certificación que han desarrollado junto a AENOR, la Certificación Welfare en Bienestar Animal, la cual está basada en las referencias europeas de Welfare Quality.  Por su parte, Interporc presentó su Certificado de Bienestar Animal, sello cuya obtención requiere el cumplimiento del “Reglamento Técnico de Bienestar Animal y Bioseguridad Interporc Animal Welfare Spain”, desarrollado por el propio sector porcino español.

En la mesa participaron además otras entidades del sector como Anprogapor (Asociación Nacional de Productores de Ganado Porcino), y ANDA (Asociación Nacional para la Defensa de los Animales), con sus respectivos representantes, Miguel Ángel Higuera y Alberto Díez.

Alberto Álvarez, Food Chain Director de la Unidad de Porcino de Zoetis, centró su intervención en la parte del Certificado de Interporc que tiene que ver con la ausencia del dolor por manejo (apartado 5.6.2), ya que considera que hay un tipo de producciones de alto nivel de bienestar animal que se ven perjudicadas. 

Dentro de dicho punto se exime a las DOP (Denominación de Origen Protegida), IGP (Indicación geográfica Protegida) o ETG (Especialidad Tradicional Garantizada) del cumplimiento del mismo, que especifica que, para la obtención de este certificado, debe de haber ausencia de castración sin anestesia ni analgesia. Sin embargo, se indica también que las granjas Tipo 2 y Tipo 3, de alto nivel en bienestar animal, deben realizar la castración por métodos alternativos a la castración quirúrgica, es decir, manteniendo los testículos. 

Dado que, en los pliegos de condiciones de las DOP, ITG o ETG se obliga a los productores a entregar a los cerdos castrados, se impide que estas granjas Tipo 2 y 3 puedan ser proveedores de dichas DOP o IGP, ya que los inspectores penalizan los cerdos con testículos a su llegada al sacrificio, aunque estos hayan sido sometidos a inmunocastración, estrategias genéticas o planes de alimentación para eliminar el olor sexual.

Por ello, durante su intervención, Alberto abogó por modificar estos pliegos de condiciones a las normativas actuales para que estas granjas con alto nivel de bienestar animal puedan obtener el Certificado. Asimismo, desde la compañía apuestan por un plan de comunicación a inspectores y veterinarios, para que, cerdos que se han sometido a técnicas de castración que no implican la pérdida de testículos puedan ser admitidos también como parte de las DOP e IGP.

Por último, dentro del congreso, Zoetis estuvo presente en la exposición comercial con un stand en el que destacó su gama de vacunas Suvaxyn®.