Katrin Strutzberg-Minder1, Astrid Tschentscher1, Martin Beyerbach2, Matthias Homuth1 y Lothar Kreienbrock2

1 DIVD Innovative Veterinary Diagnostics (IVD GmbH), Seelze (Alemania).
2 Institute for Biometry, Epidemiology and Information Processing (IBEI). Hannover (Alemania).

Resumen

Antecedentes: Ante la ausencia de datos actualizados sobre la prevalencia de la infección por leptospiras en cerdos en Alemania, se analizaron datos de laboratorio de pruebas de diagnóstico llevados a cabo con muestras de cerdos de toda Alemania desde enero de 2011 a septiembre de 2016. Se analizaron un total de 29.829 sueros mediante la prueba de aglutinación microscópica (MAT) para anticuerpos frente a cepas de once serovariedades de Leptospira.

Resultados: En general, el 20,2% (6.025) del total de las muestras dieron positivo frente a la infección por Leptospira. La seropositividad osciló entre el 16,3% (964) en 2011 y 30,9% (941) en 2016 (sólo desde enero a septiembre). De todas las muestras, el 11,6% (57,3% de los positivos) reaccionaron frente a un solo serovariedad de Leptospira, mientras que sólo el 8,6% (42,7% de los positivos) reaccionaron simultáneamente frente a dos o más serovariedades. La serovariedad detectado con más frecuencia fue Bratislava, que se encontró en el 11,6% (3.448) de todas las muestras, seguido por los serotipos Australis en el 7,3% (2.185), Icterohaemorrhagiae en el 4,0% (1.191), Copenhageni en el 4,0% (1.182), Autumnalis en el 3,7% (1.054), Canicola en el 2,0% (585) y Pomona en el 1,2% (368).

El modelo mostró que tanto el año como el motivo de la realización de las pruebas de laboratorio tuvieron efectos es- tadísticamente significativos sobre los resultados de las mismas; sin embargo, no se determinaron interacciones entre estos factores. Los resultados obtenidos sugieren que las seropositividades encontradas pueden considerarse como indicativas del estado de las infecciones por leptospiras en las granjas de porcino alemanas.

Conclusiones: Aunque los datos de la vigilancia pasiva son propensos al sesgo, el análisis estratificado de los motivos de examen y el análisis por el modelo de aproximación pueden corregir estos sesgos. Una prevalencia de alrededor del 20% de infección por Leptospira es las más probable para las cerdas con problemas reproductivos en Alemania, con una tendencia creciente. Probablemente, en Alemania, los cerdos constituyen un reservorio para el serotipo Bratislava, pero a diferencia de lo observado en otros estudios no para Pomona ni Tarassovi.

Antecedentes

Se estima que la leptospirosis es la zoonosis más extendida en todo el mundo[1]. Es una causa de pérdida reproductiva en explotaciones de cría de cerdos y ha sido encontrada en poblaciones de cerdos de todo el mundo[2]. Las infecciones endémicas en explotaciones porcinas permanecen, generalmente, en fase subclínica, al igual que la gran mayoría de las infecciones por leptospiras. Sin embargo, cuando un rebaño se infecta por primera vez o se compromete su in- munidad, pueden registrarse pérdi- das considerables a causa de abortos, nacidos muertos, lechones débiles o infertilidad. Las leptospiras persisten en los riñones y el tracto genital de los cerdos portadores y se excretan en la orina y fluidos genitales[2].

Los cerdos actúan como reservorio de los serotipos pertenecientes a los serogrupos Pomona y Australis[3-6], mientras que Icterohaemorrhagiae, Grippotyphosa y Tarassovi son los serogrupos que se encuentran entre las infecciones clínicas más común- mente identificadas en los cerdos[2]. La serovariedad Bratislava es endémico en el cerdo en algunas regiones[7-9]. Las pruebas serológicas son el procedimiento laboratorial más utilizado para confirmar el diagnóstico clínico, determinar la prevalencia del rebaño y realizar estudios epidemiológicos. La técnica serológica de elección es la prueba de aglutinación microscópica (MAT). Los requisitos mínimos para el antígeno consisten en que la prueba incluya cepas representativas de todos los serogrupos que se sabe existen en la región particular, así como los que se sabe se mantienen en otros reservorios.

Un título de 1:100 es comúnmente aceptado como positivo para el co- mercio internacional[10], pero dada la alta especificidad de la MAT, se pueden considerar títulos más ba- jos como evidencia de exposición previa a Leptospira. La MAT se usa para evaluar animales, tanto, a nivel individual como de rebaño. Como prueba individual, la MAT es muy útil para el diagnóstico de la infección aguda (debido a su alta sensi- bilidad): un incremento de cuatro veces en los títulos de anticuerpos en muestras de suero de animales enfermos y convalecientes se considerapositivo.

Para obtener información útil de un rebaño de animales, al menos diez animales, o el 10% de la manada, el que sea mayor, deben analizarse con una sensibilidad suficiente, y se debe considerar el historial de vacunación y si hay vacunas disponibles[2, 10]. En Alemania no se había registrado ninguna vacuna a 31 de agosto de 2016[11], aunque a día de hoy hay una vacuna para porcino disponible en Alemania. La MAT tiene limitaciones en el diagnóstico de la infección crónica en animales individuales y en el diagnóstico de infecciones endémicas en los rebaños. Los animales infectados pueden abortar o ser portadores re- nales/genitales con títulos por MAT inferiores al título mínimo de 100 en la dilución final[2, 10].

Debido a todos estos factores, no se permite expresar la especifici- dad y la sensibilidad de MAT como porcentajes. Sólo disponemos de unos pocos estudios recientes sobre cerdos domésticos; estos muestran seroprevalencias del 55,9% en cerdos en Colombia[12], 16,1% en cerdos en explotaciones porcinas modernas en el estado de Alagoas, Brasil[13], 8,6% en Corea[14], y 2,7% en cerdos para los serovariedades estudiados en Polonia[15]. Además, hay dos estudios más antiguos[16]que describen prevalencias que van desde 1,2% para cerdos en Alema- nia [17] al 73,3% en cerdas en Viet- nam (Delta del Mekong)[9].

Aunque la leptospirosis ya no es una enfermedad de la lista de la OIE, en Alemania, en el caso del ganado porcino y ovino, todavía es una en- fermedad de declaración obligatoria y una zoonosis, aunque no hay datos recientes sobre prevalencia de infección en el porcino de Alemania. Los últimos datos disponibles en Alemania datan de 1984, publicados en 1987 [17]. Hay un estudio que recopila los datos de vigilancia pasiva de los cerdos en Alemania para la infección con leptospiras (2003 a 2010) que fueron presentados en EuroLepto 2012[18].

Para este trabajo hemos analizado las muestras de laboratorio remitidas rutinariamente de enero de 2011 a septiembre de 2016, distinguiendo subgrupos basados en el motivo del examen o toma de muestras, con el objetivo de estimar el grado de infección con leptospiras de los cerdos en Alemania y estudiar la relación entre serovariedades y subgrupos de muestras.

Materiales y métodos

Toma de muestras

Los exámenes de diagnóstico se llevaron a cabo en el laboratorio de diagnóstico de IVD GmbH, Seelze, Alemania, con 29.829 muestras de suero tomadas de cerdos de diferentes partes de Alemania entre enero de 2011 y septiembre de 2016.

Toda la información disponible sobre las muestras de suero, como la granja de origen, edad, sexo del animal, fue recogida mediante un sistema de gestión (Ticono-LC, Ticono GmbH, Hannover, Alemania) y valorando si había suficiente información disponible. La frecuencia de remisión de las muestras para su examen, según el origen geográfico, fue paralela a la densidad de cerdos en Alemania (datos para análisis posteriores, no publicados). Las muestras recibidas en el periodo de estudio provenían de 2.571 granjas. Además, analizamos las muestras por rebaño y por año. Como algunas granjas enviaron muestras para su examen en más de un año, la suma total de granjas que enviaron muestras por año fue de 3.953.

Es muy probable que la mayoría de las muestras provengan de animales estabulados, porque menos del 1% de la producción porcina en Alemania se cría al aire libre, aunque este dato no fue reseñado de forma explícita. Y dado que más del 99% de los cerdos fueron alojados en naves interiores y al no disponer de datos de las condiciones ambientales en el interior de las naves, los aspectos estacionales no pudieron ser analizados de forma fiable.

Como había muy poca, o ninguna información, adicional sobre las cerdas (como el número de partos), este dato no fue tenido en cuenta para su análisis.

La información preliminar sobre las muestras, como síntomas clínicos o motivo de examen, fue sistemática- mente registrada en el formulario de remisión de muestras al laboratorio (IVD GmbH, Seelze, Alemania) y gestionada con el sistema informático para laboratorio Ticono-LC, aunque no todos los remitentes cumplimentaron el formulario en su totalidad.

La información disponible sobre las muestras y el motivo del examen se utilizó para identificar dos subgrupos que fueron analizados y comparados con el total de muestras.

El subgrupo “problemas reproductivos” comprendía todas las muestras (n = 12.017) de la población total en las que se había indicado algún problema reproductivo (casilla de verificación “Síntomas reproductivos y/o cualquier comentario sobre problemas reproductivos en el formulario). El subgrupo “monitorización” comprendió todas las muestras (n = 1.813) del total de muestras que marcaron la casilla de verificación “examen por razones de monitorización” (sin síntomas clínicos, chequeo de estado sanitario) y no se marcó la casilla de problemas reproductivos.

tabla1

Métodos de laboratorio

Todas las muestras fueron analizadas para anticuerpos frente a leptospiras por prueba de aglutinación micros- cópica (MAT) según el Manual de la OIE de Pruebas de Diagnóstico y Vacunas para Animales terres- tres desde 2008 [19] a las ediciones actuales de 2014 [10] utilizando antígenos vivos de Leptospira sero- variedad Australis (Ballico), Bratis- lava (Jez Bratislava), Canicola (cepa

Hond Utrecht IV), Grippotyphosa (cepa Moskva V), Copenhageni (cepa M20), Icterohaemorrhagiae (cepa RGA), Pomona (cepa Pomo- na), Hardjo (cepa Hardjoprajitno), Saxkoebing (cepa Mus 24) y Taras- sovi (cepa Perepelitsin). En respuesta a un análisis de las frecuencias de seropositividad de los serovariedades de Leptospira en todo el mundo [16], el serotipo Saxkoebing fue reemplazado por Sejroe (cepa M 84) en febrero de 2011, y el serotipo Autumnalis (cepa Akiyami A) fue agregado en abril 2011. Todas las cepas fueron suministradas por el Laboratorio de Referencia para la Leptospirosis de Países Bajos (KIT Biomedical Research). Los sueros se probaron previamente a la dilución final de 1:100. Los sueros con 50% de aglutinación se volvieron a ana- lizar para determinar un punto final usando diluciones de sueros que comienzan en 1/25 hasta 1/3.200. Las muestras de suero con el título de 100 (recíproco de la dilución fi- nal del suero con 50% de aglutina- ción) se consideraron positivas. Una granja es considera positiva para infección por leptospiras si, al menos, una muestra por año resulta positiva por MAT.

Métodos de estadísticos

Los datos fueron analizados en dos pasos. Para una perspectiva general, todos los datos se analizaron primero de forma independiente; los hallazgos positivos se analizaron tanto desde el punto de vista general (Tabla 2) como por serovariedad (Tablas 3 y 4).

tabla2

 

A continuación, para tener en cuenta los datos de jerarquía estructural (muestras repetidas por granja), todos los datos fueron analizados en un modelo de regresión logística jerárquica con dos regresores fijos (“año” y “motivo de toma de muestras”) y un factor aleatorio (“granja”). De aquí la robustez de la asociación entre la seropositividad y estos factores que se estimaron a través de odds ratios (OR) e intervalos de confianza asintóticos (IC) del 95% de Woolf y la prueba de razón de verosimilitud asociada. Todos los análisis se realizaron con SAS, versión 9.3 TS nivel 1 M2 (SAS Institute Inc., Cary, NC, Estados Unidos).

Antecedentes

Descripción general de la población de la muestra

En general, 29.829 muestras de diagnóstico rutinario de laboratorio fueron examinados desde enero de 2011 hasta septiembre 2016. Los da- tos proceden de 2.571 granjas, con algunas granjas con más de una prueba al año. Estas presentaciones múltiples resultaron en una suma de 3.953 granjas. La mayoría de las granjas (53,8%) enviaron entre cua- tro y nueve muestras por año, seguido del 19,0% de las granjas con sólo una a tres muestras por año, y el 18.8% de las granjas que enviaron de 10 a 14 muestras por año.

El motivo de la toma de muestras, para cada una de las muestras, se resume en la Tabla 1. De las mues- tras para las cuales existió un único motivo para el examen (n=13.830), el 86,9% fueron enviadas con la re- seña “problemas reproductivos”;

solamente 13,1% de las muestras reseñaron que el motivo de la toma fue por “monitorización” (sin síntomas clínicos) y sin ninguna reseña a problemas reproductivos.

En general, no hubo información sobre el tipo de animal para el 42,2% de todas las muestras (n=12.600). De las muestras con información sobre el tipo de animal, el 95,9% (n=16.529) fueron de cerdas (adultas y nulíparas). (Datos no mostrados).

Sólo 1.813 muestras, es decir, 6,1%, fueron identificadas como tomados a propósito de la monitorización del estado de salud de la granja. En general, la población del muestreo es, por tanto, dominada por muestras de cerdas con problemas reproductivos. La mayoría de las muestras son de granjas del noroeste de Alemania, que es el núcleo de la producción porcina alemana. En general, los hallazgos serológicos no corresponden a una prevalencia regular, porque la toma de muestras no es un estudio transversal de toda la producción porcina alemana.

Sin embargo, los datos nos dan una idea de la presencia de Leptospira en las granjas de cerdos alemanas, ya que este estudio incluye una muestra representativa de las granjas ale- mana de porcino. De acuerdo con las cifras de la Oficina Federal de Estadística [20], esto representa una media del 5,9% de las granjas oficialmente registradas por año..

Seropositividad general

La Tabla 2 presenta una visión ge- neral de los resultados de las prue- bas serológicas. En general, 20,2% (n=6.025) de las 29.829 muestras resultaron positivas por MAT. La seropositividad varió entre el 16,3% (n=964) en 2011 y el 30,9% (n=941) en 2016 (enero a septiembre). Un total del 64,5% de las granjas dieron positivo por leptospiras, en, al menos, una muestra por año. El porcentaje de granjas con resultados positivos estuvo entre el 59,3% (n=508) en 2011 y el 78,2% (n=308) en 2016. Pronosticando 4.056 muestras para todo el 2016, el número medio de muestras fue de 5.141 por año, con una variación moderada en la seropositividad entre un año y otro (Tabla 2).

El análisis de la reactividad de las muestras de suero con diferentes serotipos (Tabla 3) mostró que el 11,6% de todas las muestras exami- nadas, que comprenden el 57,3% de los positivos, reaccionó con sólo un serovariedad, mientras que el 42,7% reaccionó simultáneamente con dos o más serovariedades.

Presencia de serovariedades y variaciones año a año

El serotipo más frecuentemente detectado fue Bratislava (Tabla 4), que se encontró en el 11,6% (n=3.448) de todas las muestras, seguido por los serovariedades Australis en el 7,3% (n=2.185); Icterohaemorrha- giae en el 4,0% (n=1.191); Copenhageni en el 4,0% (n=1.182); Autumnalis en el 3,7% (n=1.054); Canicola en el 2,0% (n=585) y Pomona en el 1,2% (n=368). Todos los demás serovariedades se detectaron con me- nor frecuencia (en menos del 1,0% de todas las muestras).

La reactividad total supera el 100% debido a la posibilidad de múltiples reacciones positivas con diferentes serovariedades.

Tendencias de la seropositividad en el tiempo y subgrupos

Este modelo muestra un efecto muy marcado y estadísticamente significativo del año de análisis (p =<0.001). A partir de 2011, como referencia, la seropositividad fue en aumento, de forma estadística- mente significativa en 2012, 2015 y 2016. Además, el motivo de la

toma de las muestras influyó en los resultados (p general = 0,0005) a diferencia de las muestras toma- das con fines de monitorización, las muestras de animales con pro- blemas reproductivos eran 1,5 ve- ces más propensas a ser positivas. Debido a que las muestras en las que no se indicó el motivo o fina- lidad tienen una evolución simi- lar, podemos deducir que se trata, también, de cerdas con problemas reproductivos. Sin embargo, no se encontró relación entre el año y el motivo de la realización de la toma de muestras (p = 0,1049), lo que respalda la sospecha de que hubo una verdadera expansión de las leptospiras en la cabaña porcina de Alemania. Estos modelos admiten la evidencia de que las infecciones por Leptospira aumentaron con el tiempo. Para compensar un posi- ble sesgo de selección en estos aná- lisis, las tendencias en el tiempo se analizaron por separado mediante regresión logística según el motivo de la toma de muestras.

Los resultados muestran efectos de la variable tiempo muy similares a los obtenidos en el modelo general, que muestra una tendencia general en el tiempo. Este efecto es diferente en el grupo “monitorización” en contraste con los subgrupos de “problemas reproductivos” y “motivo desconocido” para el muestreo. Sin embargo, ambas tendencias fueron muy similares, lo que indica que, probablemente, la mayoría de las muestras del subgrupo “motivo desconocido” se deban, también, a problemas reproductivos.

Discusión

Debido a que los datos de investigación sobre la incidencia de las infecciones por leptospiras en poblaciones de cerdos domésticos son escasos, obsoletos o ambas cosas, este estudio recurrió a datos de diagnóstico existentes para obtener una evidencia del estado actual de la infección con leptospiras en el sector porcino alemán. La ventaja de este estudio actual es que generó una gran cantidad de datos. Por supuesto, la desventaja de este estudio es que la recogida de muestras no fue representativa a la luz de los sesgos debidos a la estructura de los datos de los exámenes diagnósticos, llevando a cabo análisis de regresión logística sobre variables adicionales acerca de la granja y la segmentación en base al motivo de las pruebas; de esta manera los sesgos podrían ser compensados, demostrando que las seropositividades mostradas en el presente estudio son estimaciones plausibles de la presencia de Leptospira en la cabaña porcina alemana.

Los estudios epidemiológicos disponibles sobre leptospirosis en porcino son muy heterogéneos, debido a las diferencias regionales y a las diferencias en la evaluación del diagnóstico (por ejemplo, diferentes serotipos usados para las pruebas) y población de estudio. En la recogi- da de muestras de nuestro estudio encontramos una seropositividad global del 20,2%, con una tendencia al aumento con el tiempo. Una sero- prevalencia similar del 16,1%[13] fue encontrada en 342 cerdos en cinco

distritos en el estado de Alagoas, Brasil, pero en contraste con nuestros resultados la serovariedadiedad más frecuente fue Icterohaemorrhagiae (41,8% de los 55 positivos), seguido de Autumnalis (29,1%) y Bratislava (9,1%), que fue el serotipo más frecuente en este estudio (57,2% de positivos).

Un estudio reciente sobre la prevalencia de anticuerpos frente a serovariedades de Leptospira en cerdos de Polonia (n = 22.883) mostró prevalencias de tan sólo 1,32% a 2,68%, dentro de un periodo similar de 2011 a 2015; en Polonia la serovariedad más frecuente fue Pomona (variando entre 0,39% y 1,13%) y Sejroe (entre el 1,12% y 0,18%), aunque este estudio no utilizó anticuerpos frente a Bratislava[21]. En nuestro estudio, las seroprevalencias para Pomona fueron ligeramente más altas, mientras que las de Sejroe fueron mucho más bajas.

Los resultados muestran que, incluso en lugares geográficamente similares o cercanos, las prevalencias globales de infecciones por Leptospira pueden ser similares, mientras que la frecuencia de los serotipos puede variar sustancialmente.

Las diferencias en la frecuencia de los serovariedades pueden ser causadas por la dinámica de la infección a lo largo del tiempo debido a la densidad de población de fauna silvestre que actúa como reservorio y a las condiciones climáticas (temperatura media del aire ≥ 18 °C y períodos de fuertes lluvias).

Más de la mitad (57,3%) de los sueros positivos reaccionaron por MAT con un solo serotipo, presumiblemente indicando la infección que causa la serovariedad y el estadio crónico de la infección, de modo que, en última instancia, debemos asumir que el 11,6% de los cerdos examinados estaban crónicamente infectados por Leptospira[22]. Por otra parte, el 42,7% de los sueros positivos reaccionaron, simultáneamente, con dos o más serovariedades, indicando ambas reacciones cruzadas de serovariedades del mismo serogrupo y la fase aguda de la infección, debido a la inducción de anticuerpos contra antígenos comunes de Leptospira en la primera fase de la infección. Por otra parte, paradójicamente, la respuesta inmune ocurre en el estado agudo de la infección, lo que significa que el 3,2% de todos los cerdos examinados en este estudio muy probablemente estaban en una etapa aguda de la infección (reacciones con tres o más serovariedades simultáneamente y, a lo sumo, dos serovariedades pertenecen a un mismo serogrupo)[22]. Teniendo en cuenta que el MAT no es una prueba perfecta, ya que es altamente específica, pero de baja sensibilidad en el caso de infecciones crónicas y endémicas [10], las seropositividades de este estudio muy probablemente están subestimadas.

Debido a la diferente epidemiología de los serotipos o serogrupos, cada serotipo analizado en este estudio será discutido por separado. Sobre la base de estos resultados y los de anteriores análisis [18], Bratislava, aparentemente, sigue siendo endémica en la cabaña de cerdos de Alemania, donde los cerdos actúan como reservorio de este serovariedad, como sucede en muchos otros países y regiones de todo el mundo[16]. Dado que se cree que la transmisión venérea juega un papel importante en la propagación de la infección de Bratislava, este es el factor más crítico en el control de la infección. Sin embargo, debido a las dificulta- des en el cultivo de estas cepas[17] y la incapacidad, hasta el momento, para identificar el serotipo mediante PCR, las infecciones porcinas por Bratislava todavía son poco conocidas[2].

Aunque el porcentaje de los positivos para el serotipo Pomona no son, en general, superiores a 6,5% (6,1% en este estudio), con algunas excep- ciones[12, 23], Pomona, en particular, todavía se encuentra en casos con abortos documentados en Alemania[24]; Desafortunadamente no hay datos más recientes disponibles. Los servicios de diagnóstico de IVD GmbH, en Alemania, informan de algunos casos de abortos, cada año, con señas claras de que estos fueron causados por Pomona (comunicación personal).

Debido a estos brotes ocasionales de enfermedad, en contraste con la enfermedad clínica generalizada de cepas adaptadas al porcino, se presupone que estas cepas se refugian en los roedores[2, 25, 26].

Inicialmente se pensó que el cerdo actuaba como reservorio de algunas cepas de la serovariedad Tarassovi encontrado en Europa del Este y Australia[2], pero a tenor de las seroprevalencias encontradas en la mayoría de los estudios[16, 21], así como valores de 0,5% observados, en general, en este estudio, apoyan la versión que las infecciones por Tarassovi son infecciones poco importantes resultantes del contacto de los cer- dos con la fauna silvestre y que, por tanto, el cerdo ya no es un reservorio de este serovariedad.

Aunque las leptospiras pertenecientes al serogrupo Canicola se ha recuperado de los cerdos en varios países[2, 27], se sabe poco sobre la epidemiología de la infección en los cerdos por este serovariedad. Los perros son un reservorio para este serotipo, pero la vida silvestre también puede ser una fuente de infección. Los largos períodos de eliminación en la orina observados en cerdos infectados y la capacidad de Canicola para sobrevivir en la orina del cerdo sin diluir sugieren que la transmisión intraespecie ocurre [2]. Aunque las seroprevalencias para la serovariedad Canicola en todo el mundo, por lo general, no superan el 1,5% [9, 16], fue la serovariedad más frecuente en un estudio sobre un área de los trópicos colombianos en cerdos (62,4%) y en humanos (64,5%), y menos frecuente en perros (14,1%)[12].

Además, en este estudio se observó una seroprevalencia general de 2,0%, con un aumento continuo en el tiempo, estadísticamente significativo. Debido a los niveles de bioseguridad generalmente altos en las piaras alemanas, es poco probable que los cerdos puedan infectarse con la serovariedad Canicola a través de perros o animales silvestres y, por tanto, sería necesario realizar más estudios para determinar la vía de entrada de la serovariedad Canicola en las granjas de cerdos alemanas.

La evidencia serológica de la presencia del serogrupo Icterohaemorrhagiae ha sido hallada, con diferente frecuencia, en muchos países[16], aunque se han hecho pocos aislamientos en cerdos[2]. Ambos serovariedades Copenhageni e Icterohaemorrhagiae pueden estar implicados en estas infecciones, situación que es compatible con nuestros datos de seropositividades generales de 4,0% y 4,0%, que corresponden a 19,6% y 19,8% de los positivos, respectivamente. Es probable que ambos serovariedades se introdujeran en rebaños susceptibles a través del medio ambiente contaminado con orina infectada de rata de alcantarilla (Rattus norvegicus), que es el reservorio de estos serotipos. Los roedores también son sospechosos de introducir infecciones con Icterohaemorrhagiae en granjas porcinas de Brasil[13].

La infección por serovariedad Grippotyphosa se mantiene con reservorios en la fauna silvestre, y la infección de cerdos da lugar a bajas prevalencias en algunas regiones, particularmente en el este y el centro Europa y los Estados Unidos[2], dato que también se reseña en el presente estudio (0,8% global). La aparición de un brote humano de Leptospira con serovariedad Grippotyphosa entre los recolectores de fresa en Alemania, en el verano de 2007, fue, con toda probabilidad, debido a la transmisión por el ratón de campo o topillo (Microtus arvalis)[28].

En función de la existencia de condiciones climáticas apropiadas para la Leptospira y la densidad de población de estos roedores, existe, en cualquier granja, el riesgo de infección con leptospiras a través del ratón de campo.

La seropositividad del serotipo Hardjo en los cerdos de es- te estudio fue muy baja (0,1%; 35/29.829), mientras que fue la serovariedad más frecuente (3,1%) en jabalíes en Polonia[29]. Además, la serovariedad Sejroe, que como la serovariedad Hardjo pertenece al serogrupo Sejroe, fue muy raramente detectado serológicamente (0,0%; 9/29.247) en este estudio, mientras que fue la serovariedad más común en cerdos en Polonia, aunque con un bajo nivel de prevalencia (1,12% en 2011 a 0,18% en 2015)[15]. La serovariedad Hardjo se acantona en el ganado vacuno de todo el mundo, y la infección de los cerdos con Hardjo se produce cuando las vacas y los cerdos entran en contacto directo.

La cría simultánea de cerdos y va- cas es muy rara en Alemania, por lo que el riesgo para los cerdos de una infección con la serovariedad Hardjo es bajo en este país, lo que es compatible con los datos regis- trados en este estudio (seropositividad de 0,1%).

El repaso de la bibliografía existente mostró altas seroprevalencias de la serovariedad Autumnalis en cerdos en todo el mundo[16]. Los resultados de este estudio, que muestran seropositividades generales del 3,7%, con una tendencia creciente, confirman la necesidad de realizar pruebas a los cerdos para anticuerpos frente al serotipo Autumnalis, bajo la sospecha de que los roedores u otros animales salvajes son su principal reservorio.

En general, la interrupción de la transmisión entre cerdos u otros reservorios de la enfermedad sigue siendo el factor crítico para el control de las leptospiras.

Conclusiones

La infección de los cerdos con lep- tospiras es, sin duda, un proceso di- námico. Los análisis de los datos de la vigilancia pasiva basados en los exámenes rutinarios de diagnóstico han mostrado su utilidad para obte- ner una indicación de la distribución de Leptospira y sus serovariedades en los cerdos domésticos en una región en general y en el tiempo. Reseñar información sobre el motivo de la toma de muestras, el tipo de granjas o rebaños (tamaño y tipología) y características del animal (edad y sexo, estado clínico) en las pruebas de diagnóstico permitiría una mejora en el análisis epidemiológico que también podría ser de utilidad para los veterinarios. Las aproximaciones basadas en modelos de regresión logística pueden compensar los sesgos que surgen del método de vigilancia pasiva (segmentación de las granjas, estrategia de muestreo). Finalmente, este es un llamamiento a todos veterinarios de porcino para proporcionar toda la información disponible sobre los animales y las granjas para permitir un buen diagnóstico y mejorar los análisis epidemiológicos.

Sobre la base de estos resultados se recomienda una vigilancia activa, sobre la cabaña porcina alemana, de las infecciones por leptospiras. También habría que incrementar la vigilancia sobre las infecciones sub- clínicas por Leptospira, así como la leptospirosis en la producción porcina y los reservorios de la enfermedad. Es especialmente importante ser conscientes de la importancia de las infecciones subclínicas por leptospiras y ver la leptospirosis como un todo conjunto con las medidas de manejo, el ganadero, el veterinario, etc. Sin embargo, cualquier ser humano, desde el propietario de un perro hasta el aficionado a los

deportes acuáticos, también puede estar expuesto a muchas fuentes de contagio, incluyendo otros reservorios (por ejemplo, ratones de campo y perros), además de aguas y suelos contaminados con leptospiras bajo condiciones climáticas óptimas.

Para una mejor comparación de los estudios epidemiológicos sobre las seroprevalencias de la infección por leptospiras en cerdos, las serovariedadiedades Bratislava, que se ha convertido en la principal fuente de infección por Leptospira para los cerdos, y Pomona, que causa enfermedad clínica, siempre deben ser incluidas en las pruebas por MAT. También se recomienda que otros serovariedades, como Icterohaemo- rrhagiae, Copenhageni, Autumnalis, Grippotyphosa y Canicola, que están involucrados en infecciones poco relevantes en los cerdos, pero que tienen su reservorio en otras especies animales, se incluyan en la toma de muestras serológicas de MAT de la cabaña porcina de Alemania y, posiblemente también, en países o regiones limítrofes con explotaciones de cerdos de tipología similar, debido a la fácil transmisión por parte de los roedores y otros animales salvajes próximos a las granjas.

Bibliografía

Este artículo dispone de una amplia bibliografía que puede ser solicitada por email a: info@produccionanimal.com.