Corea del Sur ha ofrecido su ayuda a Corea del Norte para detener un brote de glosopeda, también conocida como fiebre aftosa, que están sufriendo su ganado porcino. Se trata de la primera oferta de ayuda entre las Coreas desde 2010.

El Ministerio de Agricultura de Corea del Norte ha informado este sábado de la infección de al menos 3.200 cerdos. Algunos de ellos han muerto a consecuencia del virus, pero la mayor parte han tenido que ser sacrificados.

El brote, que comenzó el pasado 8 de enero, ha provocado pérdidas económicas y se ha estado extendiendo debido a la falta de tratamientos médicos, herramientas de diagnóstico y desinfectantes, según han informado los medios locales.

Por su parte, el Ministerio de Agricultura surcoreano ha informado de que ayudará a Pyongyang a contener la epidemia. «El Gobierno ha sugerido que se celebre hoy una reunión práctica para debatir nuestra oferta de ayuda, ya que entiende que (la situación) requiere medidas urgentes», ha alertado a través de un comunicado.
Las relaciones entre las dos Coreas son habitualmente tensas. No obstante, desde el pasado 20 de enero cientos de surcoreanos han cruzado la frontera para reunirse con familiares con los que no habían podido contactar desde el final de la guerra, en 1953.

Las reuniones se han celebrado a pesar de las críticas de Corea del Norte sobre los ejercicios militares entre Corea del Sur y Estados Unidos, que han comenzado este lunes, y que Pyongyang define como un simulacro para una eventual guerra contra su Gobierno.

FIEBRE AFTOSA

La fiebre aftosa afecta a los animales de pezuña hendida, como ovejas, cabras, vacas y cerdos, y en rara ocasión infecta a seres humanos.

Seúl se vio obligada a sacrificar al 10 por ciento de su ganado vacuno y porcino en 2010 y 2011 debido a un brote del virus, cuya detención costó miles de millones de dólares. Corea del Norte también sufrió un brote de glosopeda en 2011.

Corea del Sur no importa ningún tipo de carne desde el país vecino. No obstante, ha intensificado los procesos de desinfección de los trabajadores del complejo industrial de Kaesong, gestionado conjuntamente entre ambos países, así como la limpieza de personas que están cruzando la frontera para celebrar las reuniones familiares.