La European Milk Board asegura que los «famosos lagos de leche» están de vuelta con una oferta muy superior a la demanda en el mercado europeo. Sólo en 2014, la UE produce alrededor de 7,5 millones de toneladas más de leche que en el año anterior.

Las consecuencias para los productores son drásticos. El precio de la leche está en caída libre en toda Europa. Por ejemplo, en Bélgica, los Países Bajos, Irlanda y Francia, los precios cayeron muy por debajo de la marca de 30 céntimos, cantidad con la que es imposible cubir los costes de producción.

La EMB exige a los políticos a actuar. «Exigimos  medidas que permitan reducir la producción de leche en la UE entre un dos y un tres por ciento, para permitir el suministro a adaptarse a la demanda de nuevo», dice Romuald Schaber, máximo responsable de esta organización.

Por otra parte, la situación actual mostró que los instrumentos de crisis disponibles, como la intervención y el almacenamiento privado son totalmente inadecuados para contrarrestar las crisis como la actual. Además, es precisamente en tiempos de crisis que la protección de fronteras de la UE se debe aplicar de manera sistemática, para evitar que los esfuerzos de los productores de leche en la UE para adaptarse al mercado siendo frustrados por las importaciones baratas.